El entrenador del Villarreal analizó el empate ante el Rayo Vallecano destacando la dificultad del partido tras el gol rival y la expulsión de Willy Kambwala. Reconoció que el gol llegó en una acción evitable y lamentó la falta de acierto en momentos clave, algo que anteriormente el equipo lograba aprovechar. Pese a las adversidades, expresó orgullo por el esfuerzo, el juego mostrado y la conexión con la afición.
Subrayó la capacidad del equipo para adaptarse tras la expulsión, manteniendo una buena lectura táctica y un alto nivel de compromiso en un encuentro complejo. Aunque el empate no era el resultado deseado, valoró el esfuerzo colectivo y el nivel competitivo mostrado.
Destacó especialmente el regreso de Juan Foyth tras sus problemas físicos, elogiando su calidad y capacidad para competir al máximo nivel. Manifestó su alegría por su recuperación y disponibilidad, reconociendo lo duro que es para un jugador atravesar largas lesiones.
Por último, enfatizó la importancia de mejorar el rendimiento en casa de cara a la segunda vuelta de la temporada. Hizo un llamado a la afición para mantener el ambiente de apoyo mostrado, confiando en que el equipo podrá construir sobre esta base para alcanzar mejores resultados.