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“Es un punto, sumamos”

Julián Calero analizó el empate del Levante UD en La Rosaleda, lamentando la oportunidad perdida de acercarse al ascenso directo, aunque valoró el punto sumado en un estadio complicado.

El técnico granota reconoció que su equipo sufrió en la primera parte, especialmente en la banda derecha, donde Antoñito generó muchas dificultades. También destacó que, pese a no jugar como acostumbran, tuvieron opciones claras, incluyendo el 0-2, que pudo sentenciar el partido antes del empate malagueño. En la segunda mitad, el equipo mejoró, pero el desgaste físico de jugadores como Iborra y Manu Sánchez afectó el rendimiento. Con el 1-1, el partido se volvió loco, con ocasiones para ambos equipos. Calero aceptó el empate y destacó el esfuerzo del rival y el ambiente del estadio.

Sobre Iborra, explicó que buscaba estabilidad en el mediocampo con dos centrocampistas puros, dándole libertad a los jugadores ofensivos. La ausencia de Lozano fue una decisión táctica, no por rendimiento. También comentó que, de haber mantenido la ventaja, habría hecho cambios distintos para conservar la estructura del equipo.

En cuanto a la elección de Morales en ataque, afirmó que buscó aprovechar los espacios a la espalda del lateral rival y que cada delantero aporta algo diferente. Justificó sus decisiones tácticas basándose en el análisis del rival y el estado físico de sus jugadores, aunque reconoció que el planteamiento tuvo momentos buenos y otros no tanto.

Sobre la lesión de Brugui, mostró preocupación y espera que no sea grave. Finalmente, descartó que la experiencia haya sido el criterio principal para el once titular, priorizando la calidad y el hambre de éxito por encima de la edad. Calero sigue confiando en su equipo y en la lucha por el ascenso.