El director general del Castellón, Alberto González, expresó su descontento con los recientes arbitrajes, alineándose con las críticas previas del presidente Bob Voulgaris y el entrenador Johan Plat. En particular, se mostró preocupado por el uso del VAR y su impacto en el rendimiento del equipo, señalando que los clubes no están satisfechos con su funcionamiento. González destacó la falta de un criterio uniforme en las decisiones arbitrales y pidió una mayor transparencia en el sistema, proponiendo un modelo similar al de rugby, donde los árbitros explican sus decisiones.
Una de sus críticas principales fue la falta de acceso a los audios de las conversaciones entre árbitros, lo que considera fundamental para entender las decisiones en situaciones controvertidas. González afirmó que como «cliente», tiene derecho a recibir estos audios sin necesidad de solicitarlos, mencionando específicamente el caso del fuera de juego de Douglas en el partido contra el Eibar.
El directivo también señaló que el VAR ha asumido un rol excesivo, haciendo que las decisiones no solo dependan del árbitro en el campo, sino de los encargados del videoarbitraje. Exigió mayor transparencia en el uso de la tecnología para garantizar su fiabilidad.
A nivel deportivo, González confía en que el equipo mantendrá su buen rendimiento y evitará caer en la complacencia, especialmente en un campeonato tan competitivo como la Segunda División. Además, expresó su optimismo sobre el futuro del club, anunciando el proyecto de una nueva ciudad deportiva, comparable a las instalaciones de la Premier League, que servirá a todas las categorías del Castellón.
