El entrenador del Levante UD, Julián Calero, afronta con total convicción y emoción el decisivo duelo del próximo domingo ante el Burgos CF en El Plantío, donde su equipo podría dar un paso clave hacia el ascenso a Primera División. Lejos de minimizar la importancia del encuentro, el técnico lo califica como su “Champions personal”.
“Es lo más importante del mundo para mí ahora mismo. Quien juegue la final de la Champions, enhorabuena. Pero lo nuestro es igual de trascendente para nosotros”, aseguró Calero en la rueda de prensa previa al choque.
El madrileño conoce muy bien el escenario. Dirigió al Burgos entre 2020 y 2023, logrando con ellos el ascenso a Segunda. Por ello, advierte: “El Plantío es un estadio exigente, con un ambiente de fútbol tremendo. Ganar allí es muy difícil.”
Además, destacó el gran nivel actual del Burgos: “Se adapta muy bien a todos los contextos. Manejan muchos patrones y han hecho una segunda vuelta muy buena.” Calero prevé un partido “igualado, de mucha disputa y que exigirá concentración total”.
Pese a que el ascenso no depende solo de su equipo, ya que necesitan también un tropiezo del Elche o el Mirandés, Calero evita las cuentas: “Si ganamos, estaremos muy cerca del sueño. Pero ningún resultado me sorprendería.”
A nivel emocional, reconoció el cariño que aún siente por Burgos, pero dejó claro su compromiso con el presente: “Tengo que estar centrado en lo mío, en ayudar a mis jugadores. Esto es fútbol de verdad.”
Con una deuda económica de más de 100 millones sobre la mesa, el ascenso sería clave para el futuro del club. Pero Calero no quiere cargar con más presión: “El Levante tiene futuro con o sin ascenso. Vamos a competir con todo.”
