El Villarreal CF sufrió una inesperada y dolorosa derrota (1-0) ante el Pafos FC en Chipre, un resultado que deja al equipo de Marcelino García Toral prácticamente fuera de la repesca europea, con solo un punto en cuatro jornadas. El conjunto amarillo, lejos de su mejor versión, volvió a evidenciar una preocupante falta de acierto y continuidad en el juego.
Desde el inicio, el Submarino Amarillo se volcó en ataque, pero se topó con un Pafos muy ordenado defensivamente, capaz de neutralizar la circulación de balón castellonense. A pesar de generar dos ocasiones muy claras —una de Mikautadze y otra de Gueye, ambas tras asistencias de Moleiro—, el Villarreal no logró abrir el marcador y se marchó al descanso con un empate sin goles.
El mazazo llegó nada más comenzar la segunda parte. En una jugada aislada, el central Luckassen aprovechó un centro lateral para firmar el 1-0 en el primer disparo a puerta del conjunto chipriota. A partir de ahí, el guion fue un monólogo del Villarreal, que se lanzó desesperadamente al ataque con los ingresos de Gerard Moreno, Comesaña y Solomon, sin lograr romper la muralla rival ni superar al inspirado guardameta Michael.
Los últimos minutos fueron un asedio constante, con intentos de Parejo, Gueye y Foyth, pero sin premio. El Pafos FC defendió con oficio y aprovechó los nervios del cuadro español para sellar una victoria histórica.
Con esta derrota, el Villarreal encadena un arranque europeo decepcionante, muy alejado del nivel mostrado en sus duelos ante Juventus o Manchester United en temporadas anteriores. Marcelino deberá reaccionar pronto si quiere mantener vivas las opciones continentales del Submarino Amarillo.
