El Valencia Basket logró una trabajada y valiosa victoria ante el Estrella Roja en el Roig Arena, en un duelo de enorme exigencia física y máxima igualdad. El conjunto serbio, uno de los más en forma de la Euroliga tras ganar ocho de sus últimos nueve partidos, impuso un nivel defensivo altísimo que cerró el aro taronja durante muchos minutos. Sin embargo, la mayor rotación del equipo dirigido por Pedro Martínez fue clave para llegar más fresco al tramo decisivo y sentenciar un duelo vibrante.
El encuentro comenzó con un Valencia Basket inspirado en ataque pero incapaz de frenar a un desatado Codi Miller-McIntyre, autor de 11 puntos en menos de cinco minutos que impulsaron al Estrella Roja. La entrada de Brancou Badio cambió la dinámica: energía, agresividad y capacidad para contagiar a Moore, Pradilla y el resto del equipo. La defensa taronja creció y permitió correr, generando una primera ventaja tras un 2+1 de Moore y una técnica a Kalinic.
Pese a los intentos de Obradovic por ajustar con defensa zonal, nuevas recuperaciones y la insistencia de Jean Montero llevaron al Valencia al descanso con la máxima renta (49-39). Pero el Estrella Roja reaccionó con un parcial 3-14 tras el descanso, liderado por un incisivo Kalinic. El choque volvió a equilibrarse y el tercer cuarto terminó en empate (60-60).
En el último periodo, el físico serbio complicó cualquier ataque estático del Valencia, que sobrevivió sumando desde el tiro libre. Darius Thompson tomó el control de la dirección de juego, alimentó a Costello y Puerto y permitió a los locales entrar por delante en el esprint final. El partido se volvió caótico en los últimos segundos, con pérdidas en ambos lados. Una falta provocada por Badio y un error de Kalinic en el pase dieron el triunfo a un Valencia Basket que tuvo que sufrir hasta el último tiro libre de Costello.





