El partido entre el FC Barcelona y el Valencia CF, correspondiente a la jornada 4 de LaLiga EA Sports, se disputará finalmente en el Estadi Johan Cruyff. La decisión, confirmada por el club azulgrana este martes con el aval de LaLiga, llega a solo cinco días del encuentro y ha generado un fuerte malestar en el entorno valencianista.
La principal crítica no es únicamente el cambio de escenario, sino el modo y el momento en que se ha comunicado. El Valencia CF, que había mantenido contacto con LaLiga en todo momento, se enteró este mismo martes de que el duelo se jugará en un estadio con apenas 6.000 localidades y que no se habilitarán entradas para la afición visitante. Desde el club de Mestalla se considera una falta de sensibilidad hacia los aficionados, que no podrán organizar el desplazamiento con una mínima antelación, como sí hacen habitualmente en partidos importantes como este.
El FC Barcelona ha reservado todo el aforo para socios y socias, tal como indica en su comunicado oficial, dejando fuera a los seguidores del Valencia. Y aunque el Johan Cruyff no cumple con el aforo mínimo exigido por LaLiga para partidos de Primera División, el organismo ha aceptado la “causa de fuerza mayor” alegada por el Barça por las obras del Camp Nou.
Desde el Valencia no se ha emitido aún un comunicado oficial de protesta, pero ya se estaría valorando no conceder entradas al Barça en la segunda vuelta, cuando visiten Mestalla. Sin embargo, esta medida podría ser bloqueada por LaLiga, ya que el club azulgrana forma parte del convenio de entradas visitantes y goza de un trato especial mientras no pueda usar su estadio habitual.
