Marcelino mostró su insatisfacción tras la derrota del Villarreal en Mendizorroza ante un Alavés que terminó con nueve jugadores. El técnico lamentó que su equipo no supiera aprovechar la superioridad numérica y reconoció que hay muchos errores por corregir.
Para Marcelino, la primera parte fue equilibrada, pero la segunda estuvo condicionada por la lesión de Sivera y el tiempo perdido en parones. «A partir de ahí, hubo poco juego, muchos cortes y jugadores del Alavés en el suelo. Ellos hicieron su partido, algo comprensible por su situación, pero nosotros no supimos gestionar ese tramo final. Con superioridad numérica estuvimos lejos de lo que debemos ser, y cuando eso pasa, lo normal es perder», señaló el entrenador, quien felicitó al rival y pidió trabajar en los errores cometidos.
El técnico admitió que el equipo tuvo el control del balón, pero sin generar ocasiones claras. «Con Comesaña mejoramos en el tramo final, pero nuestra posesión fue más cómoda que efectiva. Finalizamos muchas jugadas por el centro, sin profundidad, con centros previsibles y sin peligro real», explicó. Además, destacó la falta de desmarques y el exceso de pérdidas de balón como factores clave en la derrota.
Para Marcelino, el Villarreal necesitaba marcar primero para cambiar la dinámica del partido, pero al no conseguirlo, el Alavés se fortaleció en su planteamiento defensivo. Con esta derrota, el equipo amarillo se queda sin puntos en un partido en el que, a pesar de contar con ventaja numérica, no supo imponer su juego. Ahora, toca analizar lo sucedido y corregir los errores para los próximos encuentros.
