El Villarreal salió victorioso del Sánchez Pizjuán en un encuentro marcado por las bajas y por un nuevo contratiempo en forma de lesión. Durante la primera parte, Santi Comesaña tuvo que abandonar el campo al sentir molestias en el muslo izquierdo. Aun así, el equipo logró imponerse al Sevilla y sumar tres puntos de enorme valor. Tras el pitido final, Marcelino García Toral quiso tranquilizar a la afición amarilla: “Lo de Santi parece poca cosa, ojalá lo tengamos pronto disponible”, comentó el técnico, consciente de la necesidad de tener efectivos en una fase cargada de partidos.
El preparador asturiano, preguntado por la jugada polémica que derivó en una falta peligrosa contra su equipo, evitó encender la controversia. Aseguró que el árbitro César Soto Grado no le ofreció explicación alguna, aunque desde su perspectiva la acción no debió señalarse: “El árbitro es el que decide y solo nos queda aceptar sus decisiones”.
Marcelino reconoció que el hecho de que el Sevilla jugara con diez futbolistas en los últimos minutos fue determinante, aunque defendió que el triunfo de los suyos fue justo. También destacó la dificultad de jugar en Nervión: “Aquí los partidos se hacen muy largos y cuando no concretas ocasiones claras siempre temes lo peor”.
Otro de los nombres propios de la noche fue Arnau Tenas, que debutó con el Submarino y se ganó los elogios del entrenador. “Queríamos darle una oportunidad y ha estado fenomenal, ha hecho una parada muy importante y estamos muy contentos con él, igual que con Luiz Júnior y Diego Conde”, apuntó.
Por último, Marcelino subrayó que el fútbol se decide en las áreas y lamentó la falta de eficacia en la primera parte, aunque valoró el esfuerzo del equipo en un campo exigente. Una victoria que refuerza al Villarreal y que, además, llega con la esperanza de que Comesaña vuelva pronto al grupo.