El entrenador del Levante UD celebró la victoria y el liderato tras el partido, destacando la importancia del empate antes del descanso para aliviar la ansiedad del equipo. Comentó que, aunque estaban bien en el juego en igualdad numérica, la expulsión de Ortuño fue decisiva. Calificó la roja como clara y crucial para el desarrollo del partido, ya que permitió a su equipo tomar el control tras igualar el marcador. Además, se mostró satisfecho con la actuación de Carlos Espí, quien respondió a las críticas sobre su falta de finalización en partidos anteriores, anotando un gol importante que evidenció su calidad y potencial de evolución.
El técnico también elogió a Pablo Martínez, quien había tenido un verano complicado, subrayando la importancia de su gol para su confianza. Sobre la conexión con la afición, destacó la necesidad de transmitir energía positiva y de jugar bien para mantener el apoyo de los seguidores. Sin embargo, reconoció una debilidad defensiva en las jugadas a balón parado, señalando que el equipo debe mejorar en ese aspecto para evitar encajar goles en situaciones similares en el futuro. En general, el entrenador mostró un balance positivo sobre el rendimiento del equipo y su capacidad para competir en la temporada.