El Levante consiguió una importante victoria ante el Mirandés (1-0) gracias a un gol de Carlos Álvarez, rompiendo así una racha de tres jornadas sin ganar. El partido estuvo muy disputado, con un Mirandés mejor en la primera mitad, pero sin eficacia de cara al gol. En la segunda parte, tras los cambios de Felipe Miñambres, el Levante mejoró su rendimiento y logró imponerse.
El equipo de Alessio Lisci comenzó dominando el partido con más posesión y presencia en el campo rival. Iker Benito tuvo la primera ocasión, pero Manu Sánchez desvió su disparo. Panichelli también puso a prueba a la defensa granota con dos intentos peligrosos. A los 20 minutos, el Mirandés seguía imponiéndose, generando más llegadas al área rival. Sin embargo, el Levante respondió en el tramo final del primer tiempo, con un cabezazo de Carlos Álvarez que se fue desviado y un disparo cruzado de Morales.
En la segunda parte, el Mirandés salió mejor, lo que generó algunos pitos en el Ciutat de València. Ante esta situación, Julián Calero realizó cambios estratégicos que transformaron el juego del Levante. La clave del partido llegó en el minuto 65, cuando, tras un robo en campo contrario, Morales e Iván Romero triangularon una jugada que culminó en el gol de Carlos Álvarez.
Después del gol, el Levante controló los tiempos del partido y siguió generando peligro en la portería rival. El encuentro se cerró con polémica, ya que Dadie fue expulsado por un codazo a Sergio Lozano y, en la jugada siguiente, Dela vio doble amarilla y también fue expulsado.
Con este triunfo, el Levante recupera confianza y se acerca a los puestos de ascenso, mientras que el Mirandés cae de la zona de promoción a Primera División.